miércoles, 8 de junio de 2016

QUÉ BONITO SERÍA





Qué bonito sería que una noche de junio te abrazara por la espalda cuando cortas calabacines de la cena vegetariana mientras vaciamos copas y más copas de un tinto riojano. Qué bonito sería que una madrugada de febrero, de esas de frío nórdico de plumas, te perdieras en mi espalda y me contaras las pecas con tus labios. Qué bonito sería que una tarde de octubre me quitaras las gafas con cuidado porque me he quedado dormida en el sofá apoyada mi cabeza en tu regazo. Qué bonito sería. Tan solo si tú supieras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario